Free Mustache Pink Glitter Lefty - Pointer 1 Cursors at www.totallyfreecursors.com

Seguidores

jueves, 29 de agosto de 2013

Capítulo 9: Cristina (Best Song Ever)


Narra Marta

Empezamos a caminar por las calles, siguiendo a... ¿Niall era su nombre? Vale, ya basta Marta, te estás dando cuenta de que te está empezando a gustar One Direction, pero sobre todo... Liam. Era tan.. perfecto. Estaba sufriendo por culpa de mis padres y del maldito bebé chino que van a adoptar. Si ya no me hacían caso sin bebé, con bebé ya ni me imagino:
-¿Te pasa algo Marta?-me sacó de mis pensamientos Liam-.
-No, no me pasa nada, gracias-dije, bajando la cabeza-.
-Conozco ese gesto en muchas personas. Anda cuenta, hay confianza-dijo, pasando su brazo por mis hombros-.
Me llevé las manos a la cara y empecé a llorar. Liam me levantó la cabeza cogiéndome por la barbilla:
-¡Eh! Tranquila, vamos, cuéntamelo, te sentirás mejor-me animó, abrazándome-.
-Es-está bien-tartamudeé-. Mis-mis padres no-no me hacen ca-caso, y ahora en-encima va-van a adop-adoptar un bebé, y-y es como si no exis-existiera en este mundo. Me-me siento sola-sollocé-.
-No estás sola-sonrió-. Me tienes a mí y a tus amigas-me acarició el pelo-.
-Gracias Liam. Por cierto, son las doce de la noche exactas. Estamos a 29 de agosto. Felicidades Batman.
-Gracias Marta. Has sido la primera en felicitarme-me besó en la frente-. Y... ¿eres directioner?
-No...
-¿Y cómo es que sabías el día de mi cumpleaños?-dijo, sonriendo pícaro-.
-Emm.. allí vienen los demás-cambié de tema-.
Si se entera de que me gusta, me muero:
-¡¡FELICIDADES LEYUUMMM!!-gritaron todos los demás, abrazándole con fuerza-. ¡¡VAMOS A UNA DISCOTECA Y A CENAR POR AHÍ!!-añadió Harry-.
-¡Tranquilos! ¡Tomároslo con calma! Las chicas ya tienen que volver a casa ¿no?-dijo Liam, con voz triste-.
-Pues la verdad es que...-empezó a hablar Sam-.
-¡¡Quedémonos a dormir en un hotel!!-dijo pegando saltitos Nata-. ¡¡Porfii, porfii, porfii!!
-¿Y el pijama?
-¡Dormimos en bragas tonta!-replicó Nata-.
Los chicos carraspearon, riéndose de la forma de pedir cosas de Nata:
-Estááá bieen-aceptó Sam-. Marta, Ana, avisad a vuestros padres.
Me saqué el teléfono del bolsillo a regañadientes y acompañada por Ana, me fui a un lado para llamar a mis padres. Como no, dijero que sí, para librarse de mí, como siempre. Ellos siempre tan ocupados con el papeleo de la adopción del bebé:
-Ya estamos-dijimos Ana y yo al unísono-.
-Bien. Pues a buscar un hotel-dijo Megan-.
-De eso nos ocupamos nosotros. Ahora a cenar a una pizzería-dijo Louis, sonriendo-.
-Ah, no. No nos pagaréis el hotel-dijo Sam, frunciendo el ceño-.
-No hemos pedido vuestras opiniones-dijo Zayn, riendo-. Vamos anda.
Y tras una pequeña discusión sobre quién pagaría el hotel, pasamos la mejor cena de nuestras vidas en una pizzería privada para los chicos, ya que sino llamarían la atención y no podrían cenar tranquilos. Tras la divertida cena, llena de bromas y chistes, salimos de la pizzería y vimos que fuera nos esperaba una limusina:
-Ah, no-repitió Sam-. Esto si que no-replicó-.
-¡Cállate tonta, y aprovecha!-dijo Ana, riendo-.
-Eso mismo-dijo Niall-.
Nos montamos en la limusina, Sam a regañadientes. Dentro era totalmente espaciosa, con doce asientos colocados en forma de rectángulo. Eran de cuero negro, muy cómodos. Tras veinte minutos de charla y risas, nos aparcamos delante de un hotel, de cinco estrellas, seguramente carísimo, según su aspecto exterior:
-Bienvenidas a nuestro hotel-dijo Liam, sonriendo-. Pagaremos nosotros Sam, así que no repliques más-rió-.
Sam se calló, haciendo caso a Liam, y nos bajamos de la limusina, yo de la mano de Leyum. Entramos en el hotel y mientras Louis, el más mayor, reservaba las habitaciones y demás, nosotros subimos todos a la habitación de Liam y Harry, la más grande. Allí nos sentamos en los tres sofás que había, y esperamos pacientes a que llegara Louis. Por fin, llegó acompañado de una alta mujer con el pelo negro, bien maquillada y peinada, ataviada de un vestido blanco de tirantes largo hasta las rodillas. Aparentaba unos veinti pocos años:
-Os presento a Cristina, nuestra nueva fotógrafa-dijo Louis, sonriendo-.

Narra Megan

No me gustaban las formas de esa tal Cristina de mirar a Louis. Pero qué digo. Louis no es mío, está soltero. Si Cristina quiere algo con él, no es mi problema. Además, fui yo misma la que le dijo a Louis que necesitaba más tiempo cuando casi hacemos el amor:
-Hola chicas y Zayn, Liam, Niall y Harry. Soy Cristina Móntez, mitad española mitad inglesa. Soy la fotógrafa de One Direction-se presentó, sonriendo-. Sois muy guapas, tal vez podría fotografiaros y convertiros en modelos y...
-Tranquila Cris-dijo Zayn-. Están cansadas. Hablaréis de esas cosas de chicas otro día-rió-.
-No son cosas de chicas. Son cosas de fotógrafas, modelos, y chicas guapas-replicó Cristina sonriendo-.
-Lo dicho. Cosas de tías-dijo Harry, riendo-.
-Pesados. Venía para avisaros de que mañana tenéis una prueba de fotos en La Casa del Libro, en la Gran Vía, para la firma de un nuevo libro vuestro. También era para deciros que vuestro avión privado se ha estropeado, y como no tenéis más conciertos hasta dentro de un mes, podéis quedaros aquí tres semanas más.
-¡Estupendo!-se le escapó a Liam-. Quiero decir, que nos veremos y conoceremos mejor-sonrió-.
-Exacto. Y yo podré haceros unas pruebas para modelos, chicas, si queréis-sonrió amable-.
-¡A mí me encantaría!-saltó Megan-.
-¡Y a mí!-exclamó Nata-.
-A mí lo que me gustaría sería ayudarle con las fotografías. Estoy estudiando para ser fotógrafa-añadió Sam, educada-.
-¡Por supuesto querida! Por cierto, no me habléis de usted, me hace sentir mayor. ¿Y vuestros nombres son?
Nos presentamos y, contentos por las buenas noticias de que los chicos se quedarían más tiempo y de que mañana tenían una sesión de fotos y una firma de libros en La Casa del Libro, bajamos por el ascensor hasta el restaurante principal, que a estas horas, estaba medio vacío:
-Por cierto-saltó Louis, en la entrada del restaurante-. Vuestras llaves. Megan, como eres la mayor de las chicas, dormirás en un cuarto sola. Marta compartirá habitación con Nata y Ana con Sam. ¿Os parece bien?-añadió-.
-¡Perfecto!-dijimos las chicas al unísono-. Gracias por dejarme una habitación para mí sola, Lou-añadí, sonriente-.
-No hay de qué. Vamos a comernos nuestros postres, que no comimos en la pizzería, mientras Cristina cena.
Nos sentamos en una mesa, y tranquilos, hablamos y reímos, hasta pasadas las tres de la madrugada:
-Creo que ya es hora de dormir-dijo Sam-.
-No seas aguafiestas Saam-dijeron Nata y Ana al unísono-.
-No, tiene razón, es tarde-dijo Liam, que había estado junto a Marta todo el tiempo-. Vamos a dormir.
-Estááá bieen-dijimos todos los demás al unísono-. Es lo mejor, ya que mañana a las diez os espero a los chicos en La Casa del Libro. Y las chicas venid también porfii, me gustaría que apareciérais en la revista Vevo con ellos-dijo Cris sonriendo-.
-¡No! Levantaría sospechas-dijimos todos-.
-Lo que queráis chicos. Me voy a mi habitación. ¡Hasta mañana!-se despidió la fotógrafa-.
Cris salió por la puerta del restaurante y desapareció en el interior del ascensor:
-Bueno, nosotros también nos vamos a dormir-dijo Louis-.
Llamamos al ascensor y subimos a nuestra planta. Nuestras habitaciones estaban frente a la de los chicos:
-¿Y cómo es que éste hotel no está lleno de paparazzis?-pregunté-.
-Le pedimos al personal que no dijeran nada a los periódicos-contestó Liam-.
-¿Y no lo hicieron?-dijo sorprendida Sam-.
-Tuvimos que darles una pequeña cantidad de dinero a cambio-dijo Louis, evitándome la mirada-.
-Ah, de acuerdo.
El ascensor se abrió y cada uno se dirigió a su habitación y cerró la puerta, excepto yo y Louis. Me acerqué a él y le dije:
-¿Por qué estás así conmigo?


4 comentarios:

  1. Sube el siguiente de esta y de la otra novela o esta noche aparezco en tu cuarto y te mato .__.
    Un besoo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jajaja, viste mi estado en tuenti? dale like!! de la mente magica subo mañanaa :) no eres capaz de matarme, jejejeje :))

      Eliminar